Buenos días. Esta curiosa novela es un buen ejemplo de literatura costumbrista. Ambientada en las comunidades mormonas marginales de Estados Unidos a finales del siglo XX, nos describe con precisión, ironía y un realismo descarnado la problemática de una familia "plural" y los múltiples conflictos que atraviesan su complicada existencia. Los personajes principales se nos hacen dignos de compasión , al ver cómo son víctimas de unas estructuras socioculturales retrógradas , a la vez que muchos de sus problemas se deben al ocultamiento que hace el Gobierno USA de los efectos de las pruebas atómicas sobre la población civil cercana. Una novela que me ha enganchado. En resumen, un magnífico ejemplo del mejor realismo social. Un buen libro y un buen escritor.
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